Lo que hay detrás de los disturbios en Colombia

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Las protestas en Cali se han tornado violentas y los enfrentamientos con las fuerzas de seguridad han dejado muertos y heridos.

Por segunda semana se mantienen los disturbios en Colombia, a pesar de que el gobierno del presidente Iván Duque anunció la suspensión de la reforma tributaria que originó las manifestaciones a veces violentas.

Varias comisarías de policía han sido atacadas en la capital colombiana, Bogotá. Mientras que la alcaldesa Claudia López solicitó la ayuda del ejército para vigilar las estaciones, calificando la violencia de «inadmisible».

Se espera que este miércoles haya nuevas manifestaciones a nivel nacional. Las protestas han dejado al menos 19 muertes confirmadas. La ONU ha instado a las fuerzas de seguridad a abstenerse de usar armas de fuego.

El Defensor del Pueblo de Colombia dijo el martes que 18 de los muertos eran civiles y uno era policía.

Según los informes, más de 800 personas resultaron heridas en enfrentamientos entre la policía y los manifestantes, mientras que más de 80 más están desaparecidas.

La alcaldesa López dijo que 15 comandos de la policía de respuesta inmediata, conocidos como CAI por sus iniciales en español, habían sido atacados. Los CAI son pequeñas comisarías de policía que se pueden encontrar repartidas por los barrios y que suelen tener poco más de una habitación o dos.

Un CAI fue incendiado con 15 oficiales adentro, quienes lograron escapar con vida.

En total, 30 civiles y 16 policías resultaron heridos en Bogotá el martes, dijo la alcaldesa López.

También hubo informes de incidentes en otras ciudades, incluida Cali, donde los enfrentamientos han sido más violentos.

¿Por qué protesta la gente?

Las manifestaciones comenzaron el 28 de abril e inicialmente se oponían a la reforma fiscal que, según el gobierno, era clave para mitigar la crisis económica del país.

Los mítines fueron organizados por los sindicatos más grandes, pero también se unieron muchas personas de clase media que temían que los cambios pudieran hacerlos caer en la pobreza.

La propuesta habría reducido el umbral en el que se gravan los salarios, afectando a cualquier persona con un ingreso mensual de 2.6 millones de pesos ($ 684; £ 493) o más. También habría eliminado muchas de las exenciones actuales de las que disfrutan las personas, así como el aumento de los impuestos impuestos a las empresas.

El domingo, el presidente Iván Duque anunció que retiraría el proyecto de ley. Pero eso no fue suficiente para detener las protestas, que se han convertido en un amplio llamado a mejorar los sistemas de pensiones, salud y educación de Colombia, así como contra lo que las manifestaciones dicen es un uso excesivo de la violencia por parte de las fuerzas de seguridad.

¿Qué está pasando en Cali?

Algunos de los incidentes más violentos se han registrado en la ciudad occidental de Cali, la tercera más grande del país. Las carreteras han sido bloqueadas y decenas de policías, edificios públicos y privados atacados. El comandante del ejército ha sido enviado a la ciudad para coordinar los esfuerzos de seguridad.

La oficina de derechos humanos de Naciones Unidas dijo el martes que estaba «profundamente alarmada» por la violencia contra los manifestantes en la ciudad.

Dijo que «la policía abrió fuego contra los manifestantes» en Cali el lunes. Si bien aún no se han publicado cifras oficiales, los medios locales dicen que al menos cinco personas murieron.

Kevin Reyes, un líder comunitario, le dijo a BBC Mundo que «policías y militares encapuchados dispararon con armas semiautomáticas y rifles» durante una manifestación. «Había niños y madres», agregó.

Los expertos dicen que otros factores han contribuido a los disturbios: esta es una de las ciudades más violentas del país, ubicada en una región afectada por décadas de conflicto librado por grupos paramilitares y narcotraficantes. También señalan la gran cantidad de armas que se sabe que se encuentran en la zona.

«Hay grupos civiles que piden una reducción de la violencia», dijo Katherine Aguirre, experta en derechos humanos. «Pero también hemos visto grupos de ciudadanos que han comenzado a disparar desde sus hogares, el vigilantismo estimulado por el flujo de armas en la ciudad».

¿Qué está diciendo el gobierno?

El gobierno ha culpado de la violencia a los rebeldes de izquierda. Dice que está siendo avivado por miembros del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y facciones disidentes de la guerrilla de las Farc, que no han aceptado el acuerdo de paz de 2016 y se han negado a disolverse.

«La violencia fue sistemática, premeditada y financiada por organizaciones criminales», dijo el ministro de Defensa, Diego Molano.

Los agentes de policía dicen que, en muchos casos, fueron sus agentes los que fueron atacados cuando intentaban evitar que «elementos criminales» saquearan tiendas e incendiaran autobuses.

En tanto, el presidente Duque dijo que el gobierno estaba listo para el diálogo nacional y anunció la creación de un «espacio para escuchar a la ciudadanía y construir soluciones».

No es la primera vez que las protestas contra el gobierno se han vuelto mortales en Colombia. Más recientemente, en septiembre pasado, al menos siete personas murieron en protestas desencadenadas por la pistola paralizante mortal de un hombre por parte de la policía en Bogotá.

BBC Mundo

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