Este curioso trastorno mental llamado Síndrome de Jerusalén, ha salido a relucir luego de reportarse la misteriosa desaparición del turista inglés de 29 años Oliver McAfee, quien lo podría estar padeciendo, el pasado mes de noviembre en el desierto de Negev, en Israel
MacAfee, es un jardinero devoto cristiano que llegó de viaje el año pasado a Israel y tras dejar su trabajo en Essex, Inglaterra, se dedicó a recorrer Europa en bicicleta desde abril de 2017 con el ánimo de explorar y hacer descubrimientos personales, según relataron sus amigos a BBC Mundo.
La última vez que el ciclista inglés fue visto estaba cerca de la desértica ciudad de Mitzpe Ramon el 21 de noviembre.
Tras reportar su desaparición a finales de diciembre a la policía israelí, se ha iniciado una intensa búsqueda por aire y tierra con perros y equipos de rescate.
Sin embargo, las autoridades israelíes consideran que McAfee podría estar vivo, de acuerdo a lo dicho por el portavoz de la policía israelí, superintendente Micky Rosenfeld.
Recientemente, unos viajeros encontraron varios de sus efectos personales como el monedero, la tableta y las llaves del británico, que fueron entregados a la policía para su examen.
También se encontraron algunas hojas manuscritas y una especie de santuario de piedra en una zona de arena aplanada.
«Mano derecha de Jesús»
Se estima que el Síndrome de Jerusalén que podría estar afectando a MacAfee, afecta a unas 100 personas, que visitan Israel cada año.
La extraña condición psiquiátrica se desarrolla después que la persona visita lugares sagrados. Las personas presentan una característica en común.
«El denominador común es que piensan que va a haber una redención inminente y que va a pasar en Jerusalén, o quizás en el caso de este turista en el desierto de Negev, o cualquier lugar cercano a esta zona por la que Jesús deambuló», explica el profesor de psiquiatría de la Universidad Hebrea Pesach Lichtenberg.
«La persona cree que va a jugar un rol importante en esta segunda venida de Jesús, o bien para notificárselo al mundo o siendo la mano derecha de Jesús, o algo por el estilo», añade Lichtenberg.
Aunque el Síndrome de Jerusalén puede manifestarse de muchas formas «normalmente las personas tienen algún tipo de condición mental pre existente», antes de visitar la Ciudad Santa. Posteriormente es que se revela el trastorno comenta el especialista.