BRASILIA (Reuters) – El presidente de extrema derecha de Brasil, Jair Bolsonaro, y el presidente de Argentina, Mauricio Macri, dijeron después de su primera reunión el miércoles que estuvieron de acuerdo en oponerse al gobierno autoritario de Venezuela, y Macri dijo que el presidente venezolano Nicolás Maduro es un «dictador».
También acordaron continuar integrando sus economías al «perfeccionar» el bloque comercial sudamericano Mercosur y seguir adelante con las negociaciones que ya están en marcha, como un acuerdo de libre comercio casi completo con la Unión Europea.
El compromiso de Bolsonaro con Mercosur contrastó con sus críticas a la unión aduanera durante su campaña electoral, cuando dijo que se había convertido en un foro político de izquierda y no en una herramienta para impulsar el comercio.
Pero desde que asumió el cargo el 1 de enero, los dos miembros más importantes de Mercosur ahora están trabajando conjuntamente en agendas conservadoras de reformas de libre mercado, favorables a los negocios y el fortalecimiento de la democracia en la región.
Bolsonaro y Macri están de acuerdo en unirse a Estados Unidos para aumentar la presión por un cambio democrático en Venezuela, cuyo gobierno de izquierda considera ilegítimo.
«Nuestra cooperación con Argentina en la cuestión venezolana es el ejemplo más claro de una convergencia de posiciones y valores compartidos», dijo Bolsonaro después de reunirse con Macri.
El ministro de Relaciones Exteriores argentino, Jorge Faurie, dijo que el único poder legalmente constituido en Venezuela era el Congreso dirigido por la oposición, cuyo líder la administración Trump está considerando reconocer como el presidente legítimo del país.
Macri y Bolsonaro «están de acuerdo en que queremos defender la libertad y la recuperación de la democracia en Venezuela», dijo Faurie a los periodistas.
Argentina y Brasil también firmaron un nuevo tratado de extradición para aumentar su cooperación en la lucha contra el crimen organizado, el tráfico de drogas, la corrupción y el lavado de dinero.
En una declaración conjunta, los presidentes prometieron revisar el arancel externo común del Mercosur, mejorar el acceso a los mercados y avanzar en la facilitación del comercio y la convergencia regulatoria.
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